El silbato final del árbitro confirmó lo que aficionados y gente del Club veníamos viendo en las últimas semanas: el esperado cambio de dinámica. Cuatro puntos de seis posibles y unas sensaciones de querer conseguir muchas más victorias son la prueba de ello. Esa es la mejor crónica posible para definir el encuentro ante una U.D Almansa que peleó hasta el final y que no nos puso las cosas fáciles.

Pese a que en los primeros minutos fue muy complejo proponer juego y ocasiones ante la intensidad del rival, los nuestros supieron revertir la situación y generar peligro. Iván Albert, Enzo y Aláez tuvieron oportunidad de abrir el luminoso con jugadas claras para hacer gol. Pero el héroe del partido tenía nombre: Edmilson. Los cuentos no son cómo empiezan, sino cómo acaban y la historia de este delantero es de esas. Ha sabido esperar su momento y responder como él sabe: marcando goles. Chiaparro, primero, y Popi, después pusieron unos centros precisos para Edmilson y éste no falló.

El equipo quiere más. El grupo es una auténtica piña y, bajo esa ilusión, ya se piensa en el próximo partido. La temporada no empezó como nos hubiera gustado, pero todo cambia con trabajo. En efecto, el trabajo del Club con los fichajes ha sido excelente, tal y como se está viendo reflejado en el campo. El calor de la afición en las redes sociales también es digno de destacar. Esa unión nos llevará por el camino que todos queremos para que Ciudad Real vuelva a vibrar con su querido Manchego.